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Las ventosas electromagnéticas parecen simples de instalar y utilizar, pero cada semana, nuestro equipo de Soporte Técnico recibe docenas de llamadas y correos electrónicos de instaladores que necesitan ayuda. Aunque el funcionamiento de una ventosa puede ser sencillo, hay muchos consejos y trucos que puedes seguir para garantizar que tus instalaciones sean mucho mas exitosas.

Colocar la ventosa equivocada en el lugar incorrecto.

Cuando se instalan ventosas, es esencial examinar detenidamente el entorno en el que se instalarán. La ubicación influirá en gran parte al tipo y fuerza de la ventosa deseada. Un error común que encontramos es la instalación de ventosas de fuerza inapropiada en lugares erróneos.

Puertas internas

Para las puertas internas, el factor principal a considerar es la habitación o área a la que la puerta controla el acceso. ¿Es una zona de alta seguridad con bienes costosos? ¿O es simplemente otro piso de un edificio de oficinas que contiene diferentes departamentos? Si la puerta solo necesita mantenerse cerrada, entonces una ventosa electromagnética con una fuerza de retención de 300 kg (V3SR) será mas que suficiente. Si la zona requiere más seguridad, entonces se necesitarán 500 kg de fuerza de retención (V5SR).

Para una seguridad aún mayor, los instaladores pueden optar por un perfil con ventosa, que suele estar formado por un total de dos o tres ventosas en total. Estos productos distribuyen la fuerza de retención de varios imanes a lo largo de toda la altura de la puerta, reduciendo significativamente el riesgo de una violación de seguridad por flexión o fuerza bruta de la puerta.

Puertas exteriores

Para las puertas que dan al exterior tanto desde la entrada como desde la salida, las ventosas de 300 kg (también conocidos como ‘mini-mags’) no son suficientes por sí solos para fines de seguridad. En algunos casos, una puerta exterior es suficientemente segura con una ventosa electromagnética, un cierre mecánico y su llave. En este caso, un imán de 300 kg será suficiente, ya que su única función es mantener la puerta cerrada mientras el edificio está ocupado. Si el imán está destinado a proporcionar seguridad en la puerta, entonces se requerirá un imán de al menos 500 kg.

Instalación de imanes de superficie como cerraduras tipo ‘shearlock’

Las ventosas funcionan mediante la creación de un potente campo magnético que mantiene la placa de armadura unida al imán. Esa fuerza de retención actúa en un ángulo perpendicular a la superficie del imán. Uno de los problemas comunes que encontramos con los instaladores, es que instalan la ventosa como si fuera una cerradura tipo ‘shearlock’.

Para una ventosa de 300 kg, los 300 kg en sí es la tracción entre el imán y la placa de armadura. No es una fuerza de 300 kg cuando se aplica fuerza de corte a la instalación. Instalar ventosas de esta manera representa un riesgo de vulnerabilidad en cuanto a la seguridad, ya que la fuerza bruta podría utilizarse para deslizar la placa de armadura lejos del imán al cortarla.

Si el imán debe instalarse apuntando hacia abajo desde el marco de la puerta (o hacia arriba desde el suelo), entonces se necesitará una ventosa de cizalla o ‘shearlock’. Las cerraduras tipo ‘shearlock’ (como lo indica el nombre) combinan la fuerza de tracción de una ventosa con un pasador de metal para mantener la puerta cerrada cuando se aplica fuerza de cizallamiento.

Posición del imán en la puerta

La posición de una ventosa en la puerta tiene un impacto significativo en la fuerza de retención que ejerce. En cualquier puerta, la mejor posición para colocar la ventosa es en el borde frontal de la puerta. Uno de los problemas habituales que encontramos, es que los imanes se instalan en el borde interior de la puerta cerca del punto de pivote. Si el imán se coloca cerca de los pivotes de la puerta, se ejerce una fuerza de palanca mucho mayor cuando se empuja la puerta en el borde frontal. Si el imán se coloca en el borde frontal, su fuerza de retención es mucho más efectiva.

Falta de mantenimiento

Las ventosas requieren mantenimiento. No son un producto que puedas simplemente instalar y olvidar. Las ventosas de CDVI vienen con una garantía de diez años, así de seguros estamos de su durabilidad. Pero para que funcionen correctamente, necesitan un mantenimiento básico y regular.

Una de las cosas más básicas que puedes hacer para prolongar el rendimiento de tu ventosa es limpiarla regularmente. El aire contiene polvo de forma natural ,el cual está formado por pequeñas partículas. Algunas de esas partículas serán metálicas, especialmente en un entorno industrial. Si esas partículas metálicas se depositan en la superficie de tu ventosa y no se limpian regularmente, pueden afectar el rendimiento de la cerradura.

No seguir nuestros consejos y trucos

Muchos de los problemas y errores de instalación que nuestro equipo de Soporte Técnico encuentra son evitables. Todos estos consejos que hemos compartido en este blog te ayudarán a alargar la vida de tu ventosa, ponlos a prueba!

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